Optimismo para avanzar cuando lo fácil sería rendirse

Pere Rosales:

Hay días que no te apetece seguir, cuando el equipo está cansado, cuando el proyecto se complica, cuando los resultados no llegan. Y en esos días, lo que necesitas no es más motivación de postal, lo que necesitas es optimismo bien entendido. No el optimismo de ya verás cómo todo va a salir bien sin fundamento, sino el que dice nos va a costar, pero vamos a encontrar la forma de seguir. Hoy hablamos de eso, de cómo el optimismo no es una emoción ingenua, sino una postura estratégica para sostener la acción. ¿Qué es realmente el optimismo?

Pere Rosales:

Es la capacidad de ver posibilidades, incluso cuando todo parece que va cuesta arriba. Es la convicción de que vale la pena avanzar, de que no estás estancado, solo en una curva del camino. Y eso no significa ignorar los problemas, significa mirarlos con una mentalidad de busca salida, no excusa. ¿Por qué hace falta el optimismo para liderar? Porque la acción, la de verdad, la que cambia las cosas está llena de obstáculos, y si tu actitud es cínica, resignada o quemada, cualquier tropiezo se vuelve una razón para parar.

Pere Rosales:

El optimismo es lo que te permite persistir sin perder el foco, dar un paso más, sostener la energía cuando no hay aplausos, y mantener a tu equipo conectado con lo que sí que funciona. ¿Cómo se cultiva un optimismo útil y no 1 tóxico? Reconoce lo que está bien, eso es lo primero, incluso en medio del caos. No para conformarte, sino para recordar que no todo está mal. El cerebro se engancha al problema, el optimismo lo obliga a ver también los recursos que tiene.

Pere Rosales:

Segundo, habla de posibilidades, no solo de limitaciones. Cuando lideras, tu lenguaje importa. Si todo lo que señalas son errores, la gente se encoge. Pero si señalas oportunidades, lo que aún se puede hacer, el equipo respira y avanza, incluso empieza a pensar. Tercero, rodéate de gente que no deja de rendirse tan pronto.

Pere Rosales:

No hablamos de positividad forzada, hablamos de personas que te dicen, esto está muy difícil, pero no hemos acabado todavía. ¿Qué más podemos probar? Este tipo de energía no se improvisa, se cultiva. ¿Y esto qué tiene que ver con liderar? Pues tiene que verlo todo, porque quien no tiene una visión de lo que puede mejorar, deja de moverse, sencillamente acaba parado.

Pere Rosales:

El optimismo te permite sostener la acción en contextos difíciles, no es una emoción bonita, es una herramienta de resistencia lúcida. En el próximo episodio vamos a hablar de perseverancia, que es la hermana mayor del optimismo, porque cuando ya crees que puedes lograrlo toca demostrar que puedes seguir ahí el tiempo que haga falta para lograrlo de verdad. Si estás liderando en un entorno donde las cosas no siempre salen como esperabas y quieres mantener viva la energía para avanzar sin disfrazar la realidad, el programa IDG o in ear thevelopment goals puede ayudarte. En ese programa no hablamos de frases bonitas, hablamos de recursos internos, de capacidades que sostienen, que impulsan, que activan. Apúntate a la lista de espera y empieza a liderar con una mirada que no niega el problema, pero tampoco se rinde ante él.

Pere Rosales:

Seguimos.

Optimismo para avanzar cuando lo fácil sería rendirse